Falta de interés: el motivo principal por el que uruguayos dijeron dejar la escuela

La mayoría de los jóvenes consultados en la Encuesta Continua de Hogares de Uruguay, en 2019, dijo que habían dejado la escuela porque «no tenían interés o les interesaba aprender otras cosas». Lo trascendente de este dato es que este porcentaje se mantuvo en los distintos quintiles por ingresos económicos. Es decir, tanto adolescentes de bajos ingresos como los de familias de altos ingresos dijeron que habían dejado la secundaria porque no le encontraban sentido.

Anualmente la Encuesta Continua de Hogares le pregunta a los jóvenes uruguayos entre 12 y 29 años que no finalizaron la educación media, cuál fue la razón principal. En líneas generales, 2 de cada 4 no finalizaron por que «no tenían interés o les interesaba aprender otras cosas»; 1 de cada 4 porque «comenzó a trabajar» y 1 de cada 4 por alguna del conjunto de razones que se observa en el siguiente gráfico:

Los datos fueron analizados por Felipe Migues, un economista que estudia la educación y su relación con el desarrollo humano. Pueden seguir el hilo de la conversación sobre este tema en su cuenta de esa red social: https://twitter.com/FelipeMigues.

Hoy existen todo tipo de planes de finalización de estudios formales para jóvenes y adultos, gratuitos o privados. En Uruguay, como en Argentina, aun son limitadas las escuelas secundarias que logran generar o mantener el interés genuino por el aprendizaje, aunque sí crecen las alternativas para primaria y los primeros años. La Red de Educación Transformadora de Uruguay nuclea a algunas de esas propuestas. Pueden conocerla a través de su web: https://educaciontransformadora.uy/

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Dolores Bulit

Nací en la Ciudad de Buenos Aires en 1972. Mi educación formal ocurrió en el jardín Casa de los Niños fundado por Elena Frondizi, la Escuela Normal Nacional en Lenguas Vivas “John F. Kennedy” y la Carrera de Comunicación Social de la Universidad de Buenos Aires. Mi educación no formal se amasó en una familia numerosa, presente, matriarcal en medio del patriarcado, de clase media profesional. Sin presiones curriculares o extracurriculares, con mucho tiempo y enorme oportunidad para el juego libre en la ciudad y en el campo. También me eduqué en mis empleos y en mis viajes, en mi pareja y con mi maternidad, con todas las personas que pasan por mi vida y a través de mi experiencia más reciente y transformadora con la gestación de Tierra Fértil, un espacio de aprendizaje basado en el juego y la autogestión con 8 años de historia.

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