El Bachillerato Popular «Violeta Parra» funciona hace diez años en el barrio La Favorita de Mendoza Capital. Está cargo de una organización social, como suele ocurrir en este tipo de gestión, surgida de las necesidades y demandas de sectores específicos y vulnerados. Es un espacio de educación secundaria para jóvenes y adultas de la zona.
Según contó una de sus docentes a AlterEdu, la Dirección de Gestión Social, que funciona dentro de la Dirección General de Escuelas, decidió cerrarlo argumentando dos motivos: que no tienen egresadas y que la directora no cumple la jornada completa. «Vamos por la cuarta cohorte. En tres años se completa una cohorte. En las anteriores tuvimos, 9, 14 y 12 que finalizaron. Por una cuestión de espacio y presupuesto trabajamos así, de una camada a la vez, y ése es uno de los argumentos de cierre. Además, a principio de este año nos cortaron el subsidio al cargo directivo con el argumento de que la directora no cumplía con las horas de trabajo. Y si bien pertenecemos a un SEOS (Servicio de Origen Social), somos un secundario de jóvenes y adultas, y ese formato de cargo de jornada completa es para jardines, que son la mayoría de los SEOS. No hay una reglamentación específica y no queda claro si quien nos presenta las normas es la Dirección de Jóvenes y Adultos o la de Gestión Social», explicó.
Sobre la estructura y economía de la escuela, contó que tienen «un presupuesto de 280 mil pesos por mes. Tenemos 6 cargos docentes reconocidos y un directivo; algunas compañeras incluso comparten el ingreso por su cargo. El espacio es propio de la organización y muchos profesores hacen aportes voluntarios en compras. Además, trabajamos con parejas pedagógicas, que es una forma que elegimos, pero que no está reconocida en la Gestión Social ni en ningún ámbito educativo de la provincia», detalló. «Las docentes somos 16, entre titulares y parejas pedagógicas. La mayoría de las acompañantes son egresadas del Bachi, para darle también una mirada más barrial y territorial».
«Somos una organización política territorial no partidaria con un trabajo de cara a los social. Nuestra diferencia con otras escuelas tiene que ver con la forma en que se abordan los saberes, el diálogo entre estudiantes y docentes. Y que tenemos un espacio de cuidado de las infancias que les permite a las madres dejar a sus niños a cargo de las mujeres del merendero, que también forma parte de nuestra organización. Trabajar de esta manera es una decisión de nuestra organización».
La organización responsabiliza de la decisión al director de Educación Privada y de Gestión Social y Cooperativa del Ministerio de Educación de Mendoza, Alejandro José Sconfienza, que asumió en septiembre pasado.
La provincia es una de las pocas que ha reglamentado la educación de Gestión Social reconocida como tercera modalidad de gestión en la Ley de Educación Nacional, y tiene su propia dirección. Los SEOS, Servicios Educativos de Origen Social, fueron creados por la provincia en 1988 y suelen cubrir la franja desatendida de la educación no obligatoria, para menores de 4 años.
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