¿Escuelas experimentales dentro de un sistema público? El caso de las PROA en Córdoba

Son varias las provincias que crean «islas» de innovación educativa dentro de sus sistemas públicos. ¿Es más fácil diseñar una buena escuela desde cero que intentar mejorar las que ya hay? En Córdoba, a las nuevas secundarias técnicas experimentales las llamaron «PROA»: Programa Avanzado de Educación Secundaria». Están especializadas en desarrollo de software y biotecnología, buscando formar futuros trabajadores para la matriz productiva de la provincia.

Las fotos pertenecen a la última inaugurada, en Bell Ville. Es el sexto edificio terminado: los demás están en Villa de María de Río Seco, San Francisco, Río Cuarto, Villa del Totoral y Villa General Belgrano. Puede recibir hasta 360 estudiantes. Tiene seis aulas y tres talleres con materiales para desarrollar proyectos de Informática, Info-Arte y Ciencias, entre otras áreas de aprendizaje.

Tienen doble jornada, acceso a clubes de ciencias, arte, deportes, talleres de inglés aplicado y clases específicas vinculadas a la especialidad. Según consignan en su web, «incluyen tutorías que acercan herramientas personalizadas y acompañan los distintos ritmos de aprendizaje». Están denro del paraguas de la dirección de Educación Ténica y Formación Profesional y sus defensores se enorgullecen de que la repitencia y el abandono el del 6%, comparado con el 40% nacional en el nivel secundario.

Sitio oficial de las escuelas PROA: https://www.cba.gov.ar/escuelas-proa/

Desde 2022, legisladores y el colectivo Padres Organizados vienen denunciando hay varias funcionando sin edificio propio de las 40 que hay. También, que hay falta de docentes en las áreas ténicas específicas que demandan estas escuelas. «La Asamblea Educativa ProA Córdoba, integrada por familias, estudiantes y docentes de distintas localidades de la provincia, se manifestaron el pasado viernes 5 de abril en reclamo por las demoras en la culminación de las obras previstas para este 2024», escribe La Izquierda Diario.

Según denuncia esa agrupación de familias, faltan terminar las de Unquillo, La Falda, Mina Clavero, Villa Dolores, San Pedro, La Calera, Arroyito, Villa Totoral y La Carlota.


Dolores Bulit

Nací en la Ciudad de Buenos Aires en 1972. Mi educación formal ocurrió en el jardín Casa de los Niños fundado por Elena Frondizi, la Escuela Normal Nacional en Lenguas Vivas “John F. Kennedy” y la Carrera de Comunicación Social de la Universidad de Buenos Aires. Mi educación no formal se amasó en una familia numerosa, presente, matriarcal en medio del patriarcado, de clase media profesional. Sin presiones curriculares o extracurriculares, con mucho tiempo y enorme oportunidad para el juego libre en la ciudad y en el campo. También me eduqué en mis empleos y en mis viajes, en mi pareja y con mi maternidad, con todas las personas que pasan por mi vida y a través de mi experiencia más reciente y transformadora con la gestación de Tierra Fértil, un espacio de aprendizaje basado en el juego y la autogestión con 8 años de historia.

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